SUEÑOS, REALIDAD, COINCIDENCIAS

Hoy desperté un poco confundida. Tuve un sueño bastante extraño, soñé que estaba en una escuela tipo secundaria o preparatoria. En esta escuela estudiaba una persona que en mi vida ha sido muy especial y por razones del destino nos tuvimos que separar. El caso es que el “sujeto” en cuestión está muy enojado conmigo en la vida real y en mi sueño me dispuse a ofrecerle mis disculpas. Así que les cuento mi sueño o lo que recuerdo de él:

…Para ofrecer mis disculpas al sujeto me dispuse a contactar a una persona de cada grado de secundaria y preparatoria para que me ayudara con una descripción de lo que ellos consideraban “amor” con cada una de esas descripciones escribía una carta, la cual guardaba en una bolsa junto con el sweater de la persona que me había ayudado. Así junté 5 cartas con 5 sweaters.
Todo esto estaba en una bolsa que me dispuse a entregarle al sujeto. Llegué a su salón y con todos los nervios de una adolecente le pregunté a la maestra si podía salir el “sujeto”, quien sin otro remedio salió a mi encuentro con mucho rencor pero con la misma mirada en los ojos de quien me enamoré, en esa época.
Sin decir ni una sola palabra le entregué la bolsa que en un principio no quiso recibir, pero finalmente la recibió. Me quedé parada esperando que viera lo que se incluía. A mis ojos leyó las cartas que venían con los sweaters.
Una a una las leyó con una actitud casi inexpresiva. Al terminar me abrazó (puedo sentir ese abrazo tan real) y me dio las gracias.
Nos soltamos, me di la vuelta y me tomo la mano diciéndome que teníamos que regresar cada uno de los sweaters a sus dueños.
Nos dispusimos a hacerlo, tomados de la mano como solíamos caminar de mi trabajo a su casa, sonriendo, soñando, viviendo ese momento tan especial intensamente…

No sé si el “sujeto” lea esto. Por mi parte me convence que los sueños manifiestan lo más profundo de nuestros sentimientos conocido como el inconsciente.

---Coincidencia---

Hoy por la mañana que venía al trabajo en camión leí lo siguiente:


“…A veces nos invade una sensación de tristeza que no logramos controlar, decía él. Percibimos que aquel instante mágico de aquel día pasó, y que nada hicimos. Entonces la vida esconde su magia y su arte.
Tenemos que escuchar al niño que fuimos un día, y que todavía existe dentro de nosotros. Ese niño entiende de momentos mágicos. Podemos reprimir su llanto acallar su voz…” *

Del mismo libro más adelante:

“ …Como si hubiese adivinado mi pensamiento, levantó el vaso para brindar conmigo desde el otro lado de la mesa.
-¡Por el amor!- dijo
También estaba un poco embriagado. Decidí aprovechar la oportunidad.
-Por los sabios, capaces de entender que ciertos amores son locuras de infancia- dije
-El que es sabio, solo es sabio por que ama. El que es loco, sólo es loco porque piensa que puede entender el amor- respondió él…” *

* Fragmentos de A orillas del Río Piedra de Paulo Coelho.