lunes, 6 de abril de 2009

Me quiero volver loca

He estado masticando mucho este tema.

Buena parte de la inspiración del documental de Paulo Coelho (también catalogado como loco) y en referencia a su libro Verónika decide Morir…

Locura: del latín vulgar delirare, de lira ire, que significaba originalmente en la agricultura "desviado del surco recto" Interpretado como desviación de la norma por culpa de un desequilibro mental. Según el diccionario, significa “privación del juicio o del uso de la razón”

Frecuentemente se manifiesta como una pérdida de control, en la que los sentimientos se muestran desinhibidamente. La conducta se desplaza fuera de lo racional y las consecuencias de los propios actos no se tienen en cuenta. Los actos pueden ser objetivamente absurdos e inútiles.

Las características perceptibles de la locura abarcan un área amplia entre la actividad frenética y la catatonia. De un lado están los maníacos; en el otro los depresivos y los apáticos. A menudo se dan disfunciones en las capacidades comunicativas, que pueden disminuir la inteligibilidad del discurso y pueden parecerse al habla de un niño pequeño: repetición de porciones de frases, reduplicación, hablar con rimas simples, onomatopeyas o cantar canciones infantiles.

Uno de los grandes locos de la historia es Vincent van Gogh, quien durante sus últimos años estuvo encerrado en sanatorios mentales de forma voluntaria y víctima de esquizofrenia; aún así en los últimos treinta meses de vida llegó a realizar 500 obras y en sus últimos 69 días hasta 79 cuadros. Un loco increíble.



Creo con una convicción casi religiosa que todos tenemos algo de locos, sobre todo quienes nos hemos dedicado al arte en cualquiera de sus facetas, se nos afecta la percepción de la realidad, y eso es lo que nos hace crear.

En ocasiones me gustaría utilizar este halo de locura como un mero pretexto para evadirme de los momentos más difíciles de la existencia. En otras tantas me gustaría utilizarlo como la solución a las manías de mi vida.

Lo cierto es que aún no me atrevo a darle rienda suelta a esta locura interna. Sin embargo por unos fugases momentos me gustaría tomarme unas vacaciones de la realidad. Poder detener el tiempo y olvidar las obligaciones que me estrujan la mente.

De ahí que utilizo tanto la expresión “Me quiero volver loca”

1 comentario:

  1. Si la locura está en el cerebro... no es tan difícil volverse loco. Un par de descargas eléctricas, unas semanas tomando valium... y ya valium!!

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